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Su Majestad la Reina Isabel de la Católica,
Permítame primero presentarme humildemente ante usted, Cristóbal Colón, intrépido navegante y ferviente creyente en la posibilidad de alcanzar las Indias por vía marítima navegando hacia el oeste. Es con profunda admiración por su sabiduría y devoción hacia la grandeza de España que me dirijo a usted hoy, con la esperanza de obtener su apoyo para un proyecto audaz que podría no solo enriquecer nuestro reino, sino también extender nuestra influencia a través del mundo.
Mi proyecto es simple pero revolucionario: propongo navegar hacia el oeste, a través del océano Atlántico, con el fin de encontrar una nueva ruta hacia las ricas tierras de las Indias. Convencido de que la Tierra es redonda, estoy firmemente convencido de que siguiendo este camino, podemos evitar las rutas comerciales tradicionales y llegar a las Indias mucho más rápido y eficientemente que por vía terrestre.
Su Majestad, los beneficios de esta empresa son múltiples y extremadamente prometedores. En primer lugar, al descubrir una nueva ruta hacia las Indias, podríamos monopolizar el comercio lucrativo de las especias y las riquezas orientales, fortaleciendo así nuestra economía y nuestra posición en el escenario mundial. Además, una expedición de este tipo permitiría extender la fe católica convirtiendo a nuevos pueblos a nuestra religión, lo cual, no dudo, complacería a nuestro Señor todopoderoso.
Comprendo las preocupaciones financieras que podrían rodear un proyecto tan ambicioso, pero le aseguro, Su Majestad, que las recompensas potenciales valen ampliamente la inversión inicial. Con su apoyo financiero y su bendición, estoy convencido de que podemos realizar este viaje histórico y abrir nuevas vías hacia la grandeza de España y de su Majestad la Reina.
A la espera de su respuesta favorable, quedo a su entera disposición para discutir este proyecto en detalle y responder a todas sus preguntas.
Con todo mi respeto y lealtad hacia usted y nuestro glorioso reino,
Cristóbal Colón
Permítame primero presentarme humildemente ante usted, Cristóbal Colón, intrépido navegante y ferviente creyente en la posibilidad de alcanzar las Indias por vía marítima navegando hacia el oeste. Es con profunda admiración por su sabiduría y devoción hacia la grandeza de España que me dirijo a usted hoy, con la esperanza de obtener su apoyo para un proyecto audaz que podría no solo enriquecer nuestro reino, sino también extender nuestra influencia a través del mundo.
Mi proyecto es simple pero revolucionario: propongo navegar hacia el oeste, a través del océano Atlántico, con el fin de encontrar una nueva ruta hacia las ricas tierras de las Indias. Convencido de que la Tierra es redonda, estoy firmemente convencido de que siguiendo este camino, podemos evitar las rutas comerciales tradicionales y llegar a las Indias mucho más rápido y eficientemente que por vía terrestre.
Su Majestad, los beneficios de esta empresa son múltiples y extremadamente prometedores. En primer lugar, al descubrir una nueva ruta hacia las Indias, podríamos monopolizar el comercio lucrativo de las especias y las riquezas orientales, fortaleciendo así nuestra economía y nuestra posición en el escenario mundial. Además, una expedición de este tipo permitiría extender la fe católica convirtiendo a nuevos pueblos a nuestra religión, lo cual, no dudo, complacería a nuestro Señor todopoderoso.
Comprendo las preocupaciones financieras que podrían rodear un proyecto tan ambicioso, pero le aseguro, Su Majestad, que las recompensas potenciales valen ampliamente la inversión inicial. Con su apoyo financiero y su bendición, estoy convencido de que podemos realizar este viaje histórico y abrir nuevas vías hacia la grandeza de España y de su Majestad la Reina.
A la espera de su respuesta favorable, quedo a su entera disposición para discutir este proyecto en detalle y responder a todas sus preguntas.
Con todo mi respeto y lealtad hacia usted y nuestro glorioso reino,
Cristóbal Colón